lunes, noviembre 24, 2008
Clonación
Al principio fué duro. Mi primer duplicado se enrolló con otra mientras mi novia me presentaba a sus padres. Fué extraño porque me puse... muy contento al estrechar la mano de mi futuro suegro. Y mi suegra estaba encantada de que disfrutase tanto de su asqueroso guiso. Tener un clon es como tener doble personalidad. Con el segundo la cosa empezó a complicarse, cerraba los ojos y al abrirlos estaba en otro lugar. A mi primer yo se le cuartearon las retinas después de estar 15 horas sin pestañear. No hablo de mi en primera persona porque pasados los años aprende uno a quererse superlativamente.
Uno de mis cuerpos está tan gordo que casi ni puede caminar, pero como otro vive en el gimnasio, no tengo complejos, sólo la gloriosa sensación de haber comido hasta cebarme mientras hacía mil quinientas abdominales.
Me estoy leyendo el Quijote mientras veo la filmografía de Kurosawa, incluso una de mis copias más defectuosas no puede desengancharse de los programas del corazón. Es triste, pero así no hay conversación a la que no pueda aportar datos. He visto Memento ordenada y el montaje original al mismo tiempo. Te quedas igual.
Chimpún.
miércoles, noviembre 12, 2008
lunes, noviembre 03, 2008
martes, octubre 07, 2008
Verdugo y a su vez, juez.
sábado, octubre 04, 2008
Vorágine intangible
Entonces me detengo, la presión baja, me precipito, abro los ojos, desnudo en la nada. Todo está frío y comienzo a hundirme en la nieve, que se derrite y me inunda. Me ahogo pero sigo respirando dolorosamente, pero sin sentir nada. Nada es real, puedo sentirlo, me veo a mi mismo. observo mi destino y no hago nada para detenerlo. Vuelvo atrás, algo cambia. Hay alguien conmigo, ¿eres tú?
Imposible. Veo la salida pero no quiero exponerme a la realidad, me quema como una luz cegadora, me atrae y me repele, es inevitable, no puedo escapar pese a que escapar es lo único que puedo hacer.
Despierto y no veo nada. Claro, estoy mirando al techo y la luz está apagada.
sábado, septiembre 27, 2008
lunes, septiembre 15, 2008
Sapos y Salamandras
martes, agosto 05, 2008
Extraño
A veces puedo ser muy denso y el calor no me deja continuar... otro día quizás me moje, literal o figuradamente. O quizás llegue tarde.
Mejor fuera que dentro, dado el caso. Muy escaso.
Como demostró Tim Burton en su más infame obra, un mal final desluce la mierda que se te ha hecho tragar durante, así que lo mejor es un continuará, que deje a los pobres y escasos lectores sumidos en la desesperación, pues aún podría ser peor.
Porque segundas partes nunca fueron buenas.
"Pues el otro día vi un partido de fútbol y la segunda parte fue mejor que la primera, le pegaron al árbitro y todo."
jueves, julio 31, 2008
Impacto
Imposible apelar a la lírica, el bloqueo es total. Pero me gusta arquear las cejas. Terrorífico.
viernes, julio 18, 2008
Ligero cual velero. (¡Oh, calor, no derritas mis sesos!)
martes, julio 15, 2008
Post-it
domingo, mayo 25, 2008
lunes, mayo 05, 2008
Give it a name
Eso es lo realmente complicado, definirse.
domingo, mayo 04, 2008
Charcos
domingo, abril 20, 2008
Fuera de contexto
sábado, marzo 29, 2008
Frenético
Así, frenética, desordenada, caóticamente las palabras rellenaban todo espacio sin importar la forma y apenas el contenido.
Sólo fluir de ideas entrelazadas dudosamente sin sentido aparente. O con tanto sentido que no pueden entenderse.
Vínculos rotos, dejadez y desorientación. Creatividad cero.
The Magical Mistery Tour.
Horas perdidas pero bien aprovechadas. Como dudar de la correcta ortografía. Quizás la forma si que importa. No lo hagas mal, coge una canción triste y hazla mejor. Eso dicen los más grandes. Pero hay otros buenos. No dejes de citarlos.
Y las onomatopeyas mejoran cualquier canción. Por mala que sea la letra.
Y si nadie te escucha, habla mas bajo.
Y... ¿luego?
Nada queda pero algo hay que dejar.
jueves, marzo 20, 2008
OJOS ROJOS
El inmenso universo del Ulululu se dibuja en sus ojos rojos y redondos como dos narices de Rudolf en plena ventisca. Diminuto como es, el Ulululu puede pasar desapercibido con solo cerrar los ojos. Nadie conoce su procedencia, ni su hábitat natural, tan solo algunos lo han visto desplazarse a saltitos mientras captura enormes libélulas al vuelo con asombrosa facilidad. Son sus dragones y disfruta venciéndolos, más cuando los digiere.
Difícil de ver, oír o detectar, quienes han logrado capturar un Ulululu lo han sido a su vez por el mismo. Su mirada incendiaria atrapa al más intrépido y al menos compasivo. Indomable pese a su aspecto, el Ulululu se convierte más en amigo que en mascota, pues él elige quedarse con su captor, quien tampoco podría negarle su libertad.
Hay quien dice que el Ulululu es solo leyenda, ¡cuán equivocados están!